Una novela sobre los niños robados al nacer. Aquí la escritora Clara Sánchez narra la historia de una niña que dieron por muerta al nacer, pero que más bien fue entregada a otra familia con más recursos económicos. Es un tema de candente actualidad.
Pero la historia comienza en los años 80, cuando Verónica tiene 10 años y descubre en la vieja cartera de su padre la fotografía de una niña que jamás ha visto antes, una foto acerca de la cual su intuición le dice que es mejor no preguntar.
Años después, la muerte de la madre enfrenta a una Verónica adolescente cara a cara con un pasado del que lo desconoce casi todo, un pasado robado que la acerca más y más a esa niña de la fotografía. Entonces Verónica descubre que esa niña trabaja en una zapatería y que su madre creía que era su hija dada muerta al nacer. La madre descubrió todo esto al haber contratado en su día a una agencia de detectives.
Un día Verónica espera a Laura, que así se llamaba la niña, a que salga del trabajo y le cuenta toda la verdad, lo que había descubierto su madre. Laura se lo toma con cierta incredulidad pero comienza a mirar las fotografías de cuándo era un bebé para encontrar pistas. Su madre adoptiva y su abuela se dan cuenta y la drogan con antidepresivos para que no salga de casa.
En un descuido Laura logra abandonar su vivienda y se va a vivir a la casa de su hermana Verónica. Entonces descubrirá toda la verdad al visitar ambas el registro civil, el hospital donde supuestamente dio a luz su madre, a su prima Carol y, sobre todo, al conocer a la monja que hizo de comadrona.
Los datos apuntan claramente que están ante una trama criminal mayor de lo que esperaban al verse involucradas otras familias. Su amiga Ana era la que hacía de enlace y la que ponía en contacto a las familias. La Agencia de Detectives es contratada por Verónica y pondrá en manos de la justicia el caso de los robos de bebés, que se daban por muertos pero que realmente eran entregados a otras familias más pudientes.
Esta novela ha sido editada por la Editorial Destino y en mi apreciación personal le concedo como nota un notable alto. Buena historia.
